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Karlos Gil | Generación 2015

Karlos Gil participa en la nueva edición de Generación en la Casa Encendida. El jurado de Generación 2015 compuesto por Nuria Enguita, co-comisaria de la Bienal de Sao Paulo 2014, Tania Pardo, comisaria independiente y Francesco Stocchi, Senior Curator en el Modern and Contemporary Art Museum Boijmans Van Beuningen, ha seleccionado los 10 proyectos artísticos ganadores de la próxima edición.

La exposición tendrá lugar desde el 12 de febrero al 5 de abril de 2015 en La Casa Encendida.
Inauguración: jueves 12 de febreo de 2015, 20,00 h

http://www.lacasaencendida.es/es/noticias/generacion-2015-presentamos-los-ganadores-esta-edicion-3644

A través de diferentes medios, Karlos Gil viene reflexionando desde hace algún tiempo sobre la relación ergonómica entre signo y objeto, examinando y transformando su significado como artefacto de producción de conocimiento a través del tiempo y la memoria, y utilizándolo como hipótesis frente a lo desconocido.
El proyecto estudia la génesis del signo (referencia) a través de la relación con su referente utilizando como paradigma al Slant Step, uno de los objetos más celebres en los años 60 entre los principales artistas conceptuales debido al desconocimiento de su verdadera utilidad. Dicho objeto se trataba de una estructura de madera cuya superficie superior se inclinaba en un ángulo de 45 grados, y estaba recubierta con un linóleo de color verde.

Para ello el proyecto se nutre de la llamada ingeniería inversa desarrollada durante el transcurso de la segunda guerra mundial por el ejército ruso para estudiar aviones, armamentística y tecnología alemana. El objetivo de la ingeniería inversa es obtener información a partir de un producto u objeto, con el fin de determinar de qué está hecho, qué lo hace funcionar y cómo fue fabricado. La aplicación de ingeniería inversa nunca cambia la funcionalidad del producto objeto sino que permite obtener productos que indican cómo se ha construido el mismo.

Mediante diferentes giros ergonómicos entre el objeto y el signo y profundiza en el origen del ready-made, su proceso de articulación contextual y su mediación final como obra.
El proyecto se sumerge en nuestra capacidad de interpretar los objetos desde un prisma no lineal, donde el desconocimiento, la edición, el détournement, y la reinserción de ideas, establecen una cierta contingencia interpretativa entre el espectador, el propio objeto y la realidad.
El resultado son cuatro esculturas inéditas que enfatizan el fragmento como algo significante y la utilidad como concepto construido.